¿Despampanar o no despampanar? Esa es la cuestión.

Muy buenas a tod@s, en esta ocasión me he querido aventurar en redactar este post yo mismo y armándome de valor me voy adentrar en el mundo de la viña por el despampano.

Bien, dicho esto, lo primero que toca es explicar de forma breve y clara, que es el despampano. El despampano como aquí en la comarca del sur de Córdoba se denomina al aclareo de los futuros sarmientos de la vid, es una labor cuanto menos muy importante que tiene como fin, despojar a la cepa de los racimos que se prevé no necesita, clareando los futuros sarmientos y racimos, para que estos tomen mejor su tamaño, maduren mejor, los tratamientos fitosanitarios se repartan mejor por el interior del follaje, el aire circule con más facilidad por los racimos y en definitiva, que la uva que se obtenga sea de la calidad deseada.

¿Pero el despampano conviene siempre?

Muchos agricultores experimentados dirían que sí, sin ni siquiera dudarlo, pero yo pienso que depende de determinados factores, como:

El tipo de terreno
El tipo de variedad
Las condiciones climatológicas
Las condiciones en las que se encuentra la planta

Todo esto en definitiva repercute en el vigor que presenta la planta, ya que dependerá del tipo de terreno (si es un terreno más apto o menos apto para la crianza de viña), del tipo de variedad (hay variedades más vigorosas que otras), de las condiciones climatológicas (si ha sido un buen año de lluvia, sin daños por heladas, pedrisco… como por ejemplo, este año 2013 por estos pagos de Montilla-Moriles) y por último de las condiciones en las que se encuentre la planta (a esto me refiero con que la viña se cuide utilizando los medios adecuados para ese tipo de viña, realizándole todas sus labores y tratamientos contra enfermedades).

Pienso que, dependiendo del vigor de la planta convendrá despampanarla o no, ya que las ventajas que dijimos que presenta el despampano se pueden convertir en desventajas si no existe vigor en la planta. Explico esto con un ejemplo más claro, supongamos que este año ha llovido poco, las plantas no se han desarrollado bien porque no tienen de donde obtener su alimento por lo que el follaje no es muy denso, entonces despampanamos y clareamos los sarmientos y racimos, le proporcionamos claridad lo que a lo largo del verano va a provocar que la incidencia del sol en los racimos y sarmientos sea mucho mayor que sin el despampano, con lo que la uva será dañada en mayor medida y por consiguiente, obtendremos menos cosecha.

Para terminar, diría que el despampano es la más importante labor que se le puede hacer a una cepa, para que los racimos y sarmientos se desarrollen adecuadamente y poder obtener una uva de calidad, pero que no siempre es aconsejable despampanar, ya que dependerá fundamentalmente del vigor que presente la cepa.