Comenzamos con la elaboración del majado.

1. Añadimos a un bol o a un jarro los siguientes ingredientes: los 3 dientes de ajo medianos, 1 cucharada sopera de perejil, 1 cucharada sopera de orégano, 1 cucharada sopera de pimentón dulce, 1 cucharada pequeña de sal (siempre hay tiempo de añadir), una pizca de pimienta, 250 ml de agua, 250 ml de vino blanco y 4 cucharadas soperas de vinagre. A continuación, lo trituramos bien con una batidora hasta que quede lo más fino posible.

2. En una fuente tenemos preparado el kilo y medio de pollo, cortado en trozos, lavado y listo para cocinar. Le añadimos el majado hasta que cubra al completo todos los trozos de carne, lo tapamos y dejamos macerar en la nevera de 3 a 4 horas.

3. Ahora vamos a preparar la guarnición. Cortamos las 5 patatas medianas en rodajas gruesas. Cortamos la cebolla mediana en juliana. Lo vertemos todo en un bol. Le añadimos también los 6 dientes de ajo medianos. Las 4 cucharadas soperas de Aceite de Oliva Virgen Extra, sal y pimienta a nuestro gusto (mejor quedarse cortos que pasarse, siempre hay tiempo de añadir). Removemos todo el conjunto bien.

4. A continuación, pasamos la guarnición a la bandeja de horno que va a servir de base para el pollo. Extendemos bien toda la guarnición para que cubra toda la bandeja y añadimos los trozos de pollo con la piel hacia arriba que han estado macerando en la nevera con el majado durante 4 horas. Rociamos con un cazo parte del majado para que la carne y la guarnición absorban sabores. Introducimos en el horno a 200º grados arriba y abajo durante 40 minutos.

5. Cada 10 minutos aproximadamente sacamos la bandeja del horno y mojamos con el majado sobrante el pollo para que este no se reseque. En los últimos 10 minutos no le añadimos más majado para que la piel del pollo quede crujiente.

6. Después de los 40 minutos, reservamos el pollo y la guarnición. Con el sobrante del majado que tenemos en la fuente más el que hay en la bandeja del horno, vamos a elaborar una salsa. Vertemos el resto del majado de la fuente en un vaso y añadimos la cuchara sopera de maizena. Removemos bien el contenido. Mientras, hemos puesto a fuego fuerte la bandeja con el sobrante del cocinado, una vez empiece a hervir, añadimos el contenido del vaso poco a poco sin parar de remover. Una vez hayamos vertido todo el contenido, probamos el punto de sal y si está a nuestro gusto, ya tenemos lista la salsa para emplatar.

7. Toca emplatar a gusto de cada un@.

Una receta que en principio puede asustar por la cantidad de ingredientes que necesita pero que en la practica no resulta muy difícil de elaborar.

Maridaje

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Esperamos que te haya resultado de ayuda nuestras indicaciones sobre como preparar pollo al vino blanco y te dejamos un vídeo tutorial de Recetas de Casa LM en el que explica todo el proceso paso a paso. Suscríbete a su canal haciendo clic aquí. ¡Un saludo!