Como he dicho arriba, debes atender de forma individual a cada cliente, a mí como cliente no me vale ser uno más en el conjunto, las personas tienen nombres y por ese nombre les gusta ser llamados. No te digo que justo al entrar cada cliente le preguntes como se llama (aunque no estaría mal probar la experiencia), pero si que debes ser cercano, consiguiendo al mismo tiempo ser respetuoso, debes averiguar que le gusta y aconsejar de la mejor manera si esta persona tiene alguna duda.

Si tu cliente ha venido a reclamar alguna falta, no hagas que vague de aquí para allá explicando su problema a media plantilla, debes de disponer de una persona que se encargue de solucionar todas las posibles incidencias que se puedan producir y por supuesto, atenderlas de la forma más agradable y cercana posible, aquí sí que es aconsejable saber cómo se llama tu cliente y si es verdad que se ha cometido una falta por tu parte, solventarla de la mejor forma posible, ya sea a través de la devolución del precio del producto o mediante alguna compensación.

Ayuda a tu cliente a encontrar lo que busca, si tú no ofreces el servicio que demanda, déjale claro que servicios o productos puedes darle e informarle de la empresa más cercana que si ofrece lo que esta persona busca, con esto estas consiguiendo que esta persona se vaya con el conocimiento de que es lo que tú haces y vendes y con la agradable sensación de que le has ayudado a encontrar lo que esta persona buscaba.

La atención personalizada en Bodegas La Aurora